domingo, 3 de junio de 2012

LOS HOMBRES PÁJARO DE MÉXICO

Fascinante vista de los hombres-pájaro, en pleno ritual

El tronco de un gigantesco árbol o un poste que parece no tener fin sirven de escenario para que cinco indígenas mexicanos realicen una ancestral ceremonia de ofrenda a sus dioses tan fantástica como peligrosa.


Desde 30 metros descienden cuatro de ellos de cabeza dando vueltas y atados sus pies por varias cuerdas, mientras el quinto danza en la alturas, sobre una pequeña plataforma, tocando una flauta y un tambor. 


El juego de los voladores es un juego ritual 
de las culturas precolombinas de mesoamérica.
En la época prehispánica esta danza o ritual se celebraba cada 52 años, período en el que se cumple un ciclo cósmico según el calendario maya porque marca un nuevo sol y una nueva vida. Hoy en día es representado en las comunidades rurales durante las festividades patronales o como un espectáculo para turistas.

Cuenta una leyenda indígena que el origen de la ceremonia entre los totonacas veracruzanos, sus principales exponentes, se remonta a una sequía que afectó la zona hace un milenio y medio. Fue entonces cuando un grupo de viejos sabios enviaron a cinco jóvenes castos al monte para rendir culto a Xipe Totec, el dios de la fertilidad, y conseguir lluvias para sus cosechas. El número de integrantes del ritual se ha mantenido hasta ahora. 



Los cuatro voladores, que representan los cuatro elementos -tierra, fuego, aire y agua-, saltan con los brazos abiertos y atados de cuerdas por la cintura y los pies para girar 53 veces alrededor del poste hasta llegar al piso, simulando al parecer la caída de la lluvia. El quinto, al que identifican como el "caporal" porque es el responsable de la ceremonia, baila y se balancea sobre una plataforma en la parte más alta del poste al ritmo de la música que interpreta con una flauta y un tambor que los comunican con los dioses. Todos utilizan un traje especial hecho a mano por cada uno de ellos. Un pantalón y camisa de manta cubiertos por dos lienzos rojos, uno en la cintura y otro en el pecho, adornados a su vez con vistosos y alegres bordados de lentejuelas. En la cabeza lucen un pequeño gorro adornado con espejos, listones de colores y flores.






Son los Voladores de Papantla, en el estado mexicano de Veracruz, herederos de un ritual que tiene más de quince siglos y que acaba de ser declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.

Los llamados hombres-pájaro mantienen viva la ceremonia desde la región de la Huasteca, en el centro-noreste de México, hasta Nicaragua, aunque la gran mayoría son mexicanos. El rito se conserva de generación en generación. La mayoría de los voladores son hombres aunque desde hace tres décadas se les ha permitido a las mujeres subirse al poste, que originalmente era el tronco un árbol. 


Los llamados hombres-pájaro mantienen viva la ceremonia desde 
la región de la Huasteca, en el centro-noreste de México, hasta Nicaragua

Señalando la región Huasteca, en México.

La región Huasteca, comprendiendo los estados de:
Tamaulipas, San Luis Potosí, Querétaro, Hidalgo y Veracruz,
de esta última es más destacada su difusión, actualmente.


El ritual ha sufrido algunos cambios, pues en un principio se realizaba en el monte y los voladores utilizaban otros trajes que estaban hechos de plumas de aves, que representaban águilas, búhos, cuervos y guacamayas. Asimismo, la modernidad ha llegado también al palo ceremonial, que ha pasado de ser un tronco de árbol a un enorme poste de acero. En parte porque el "tsakáe kiwi" (chicozapote), que es el árbol del que se obtiene el palo, está en peligro de extinción.


HOMBRES PÁJAROS EN UN MURAL DEL MUSEO NACIONAL DE MÉXICO:

Aquí se aprecia el ritual de los hombres pájaros, en un mural que a su vez, describe las costumbres o ambientes del mundo antiguo de México.

Mural en Museo Nacional, México D.F. (del pintor Diego Rivera)
(Autor de la imagen: J. Antonio Herrera F.)
En los pasillos de Palacio Nacional, Diego Rivera rindió homenaje a las culturas del México antiguo con los murales de Mexico Tenochtitlan, Purepecha, Mixteco-Zapoteca, Totonaca y Huasteca. Estaba planeado que todo el Palacio Nacional estuviera adornado por murales del pintor, sin embargo no pudo concluir el proyecto pues murió en el año de 1957.

Se destaca en esta imagen:
    • Hombres-voladores: (en la zona centro superior de la imagen presentada). De la zona correspondiente a Papantla, Veracruz-México. Se aprecia danzantes alrededor de "los hombres voladores". 
    • La pirámide de Tajín: (detrás de los hombres-pájaros, en la imagen superior). También llamado la Pirámide de los Nichos, por sus 365 ventanales dispuestos a todo su alrededor.
    • Xoloitzcuintle: (en la zona centro inferior de la imagen anterior). Raza canina sin pelo similares a los perros que hay desde tiempos prehispánicos en  Perú.
    • El juego de la Pelota: (o Tlatchtli, en náhuatl). (en la zona superior izquierda de la anterior imagen). Este juego fue muy difundido en mesoamérica precolombina.

ALGUNOS VÍDEOS DE ESTA COSTUMBRE PREHISPÁNICA:
    • Un informe periodístico de la TV mexicana.

    • Dos vídeos del ritual: El segundo vídeo aún es más explicativo, para los que podemos traducir el inglés elemental, tal vez resulte más cómoda la comprensión.


Fue así, la presentación de este fabuloso rito, perteneciente a las costumbres de nuestro grandiosa América.

Será hasta otra nueva costumbre...
    NRMQ

    Fuente:

    • Mural en Museo Nacional, México D.F. (del pintor Diego Rivera)
      (Autor de la imagen: J. Antonio Herrera F.

    2 comentarios:

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